¿Qué es lo importante?

¿Tener éxito, ser infalible, alcanzar las metas, abundar en riquezas, ser reconocido, ser admirado, brillar, destacarse?

¿Es lo importante reír, gozar, estrechar los brazos, una caricia, un sueño, un descubrimiento?

¿Vencer, derrotar, dominar, abarcar? ¿Es lo que importa reprimirse, contenerse, prescindir?

¿Importa aprender, madurar, jugárselas, aventurarse, arriesgar, superarse?

¿Es lo que importa cuidar, ceder, abandonar, perder?

¿Es acaso amar, comprender, acompañar, escuchar, compartir, comunicar?

¿Es imponer, obligar, presionar, manipular, fingir, actuar?

¿Es importante crecer, perseverar, reconocerse, redescubrirse, convencerse?

¿Qué es lo importante?


En la respuesta a esta pregunta, se refleja quiénes somos, en qué creemos y a qué aspiramos. Definir lo que nos importa, nos hará buenos o malos, felices o frustrados, capaces o profundamente limitados.

Tal vez no sea posible saber qué será de nosotros en esta vida, pero sí podemos optar por qué clase de personas queremos ser. Elijamos lo que nos importa, con valor y determinación. Si no corremos el riesgo de encontrarnos algún día en una realidad que nunca quisimos, por no haberle dado importancia a lo verdaderamente valioso.

Allí dónde tenemos puesto nuestro tiempo y nuestro corazón, se encuentra lo que consideramos más preciado.

¿Qué es lo importante para vos? Nunca es tarde para descubrirlo, y si es necesario, volver a elegir pero esta vez correctamente.

Por Ignacio Larre